Bacterias: la carrera por los miles de millones

La proliferación de productos bacterianos en el mercado de los acuarios tiene el efecto de confundir tanto al principiante como al acuarista experimentado en cuanto a qué producto se adapta mejor a las necesidades de su acuario.

En la actualidad asistimos a lo que llamamos "exceso de bacterias", ya sea por los miles de millones de productos que se comercializan, los miles de millones de bacterias que los componen o incluso los miles de millones de euros que sus ventas pretenden generar en el mercado.

Pero entonces, ¿cómo puede el acuarista encontrar el producto bacteriano adecuado ante tanta oferta? ¿Cómo puede diferenciar, comparar y elegir el mejor? En este artículo, le guiamos para que comprenda mejor la función de un producto bacteriano y lo que debe esperar de él.

EFICIENCIA Y VERSATILIDAD EN LUGAR DE EXCESO

Es obvio que la función principal de un producto bacteriano para acuarios debe ser su eficacia a corto y largo plazo. Sin embargo, como la cartera del acuarista no es un pozo sin fondo, es preferible comprar el producto bacteriano más versátil posible, para satisfacer el máximo número de necesidades del acuario, ya sea de arrecife o de agua salada.

Sin embargo, hay que tener cuidado de que esta versatilidad no sea sinónimo de un exceso de bacterias. Mil millones de bacterias en un producto no significa que se cumplan muchas funciones. De hecho, suele ocurrir lo contrario, ya que su cohabitación y condensación rara vez es fértil y viable.

Así, la composición de un producto versátil y eficaz no requiere necesariamente una gran cantidad de bacterias, sino más bien una alta calidad de las mismas, en número restringido y cuya mezcla funcione en el mejor de los casos. Necesariamente se necesitan años de investigación y desarrollo con científicos de laboratorio, así como numerosos ensayos de composición y pruebas de acuario para encontrar esta alquimia perfecta y sostenible y, por tanto, eficaz y versátil.

EL PAPEL MÍNIMO DE UN PRODUCTO BACTERIANO

Por lo tanto, debería esperar de un producto bacteriano, como mínimo, las diferentes funciones:

1. El descenso de NO₃ y PO₄ para obtener parámetros regulares.
2. La lucha preventiva contra las cianobacterias y las algas invasoras: algas filamentosas, diatomeas, Bryopsis.
3. El desarrollo de la biopelícula durante las etapas de puesta en marcha, pero también en el mantenimiento, y el desarrollo de la microfauna esencial.
4. La observación de piedras que respiran y cuyos poros y células no están obstruidos, así como una arena sin sedimentos, sin residuos, sin algas.
5. Agua clara, flora y fauna energizadas: peces coloridos y vivos y corales desplegados.

Hoy en día, algunos productos son capaces de realizar estas funciones mínimas, o incluso más, al haber encontrado el mejor equilibrio bacteriano posible. Ni que decir tiene que en daphbio la investigación está en el centro de nuestro desarrollo, y perseguimos constantemente estos objetivos de eficacia, versatilidad y calidad. Nuestro enfoque en los productos vivos ha dado lugar a resultados incomparables en los acuarios hasta la fecha.

Benoît Lo Cascio, Director de daphbio